jueves, 26 de febrero de 2015

Solo se trataba de una pregunta

Un día mientas me encontraba sentada platicando en las bancas de piedra de mi escuela, con una amiga sobre nuestras experiencias sentimentales, el enamorado de ella apareció y se sentó junto a nosotras, de pronto sentí un poco de celos por ella, puesto que en esos momentos ella estaba saludándolo con un lijero beso en los labios y yo un poco incomoda lo saludaba con un gesto de la manos. Después de unos instantes de silencio el chico que de igual forma había notado nuestro silencio, se dispuso a preguntarnos de que estábamos hablando, así que mi amiga le dio una pequeña versión un poco alterada de lo que hablábamos, él dedujo inmediatamente que no le concernía nuestra plática así que solo me pregunto, quizá por curiosidad o para hablar de algo, que si yo tenia novio, a lo cual yo respondí con una sonrisa incomoda y le dije que tenia los ojos puestos en un chico. Aparentemente se dio cuenta lo vacías que sonaban mis palabras o quizá era el hecho de que evitaba su mirada, pero me preguntó como en tono de reproche "pero, ¿él tiene los ojos puestos en ti?" a lo que me quedé callada por un momento, mientras que mi mente quería gritarle al chico que se encontraba frente a mi para decirle que se callara y que no era de su incumbencia lo que pasara con mi vida, puesto que yo no tenia ninguna clase de relación, ni de  amigos con él. Todo ese torbellino de palabras surgió de repente en mi mente y tan rápido como vino se fue y de mis labios solo alcance a decir con un dejo de tristeza "no lo se, pero me encantaría averiguarlo" y una sonrisa muy forzada apareció en mis labios, para que un instante después fuera remplazada por un semblante serio y muy triste. Yo sólo quería que se fuera ese chico y me dejara con mi miga, puesto que había interrumpido nuestra conversación, sin embargo pareciera ser que mi amiga me leyó el pensamiento y con ternura le pidió al chico que se fuera y nos dejara solas. Él se disculpó por haber interrumpido nuestra conversación y con un tierno beso se despidió de ella, dejando mi mente pensativa e incluso un poco triste. Sentí que necesitaba estar sola, así que le pedí que no se fuera y me levante de mi lugar para despedirme de mi amiga y me fui, el chico inmediatamente tomó mi lugar y como si yo nunca hubiese estado hablando previamente con ella ambos se sumergieron en una platica en la que yo decidí que no quería ser partícipe y me fui a mi salón con mi corazón en la mano, repasando la pregunta que el chico me había hecho "pero ¿él tiene los ojos puestos en ti?" esa pequeña frase me mantenía muy molesta, porque realmente no sabia la respuesta y definitivamente me hubiese encantado saberla.

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